martes, 14 de julio de 2015

LA PSICOLOGÍA SOCIAL COMUNITARIA

LA PSICOLOGIA SOCIAL COMUNITARIA – MARITZA MONTERO

La Psicología Social Comunitaria (PSC) surge como una crítica a la Psicología Social por la falta de respuestas en su aplicación y praxis a los sectores sociales más oprimidos.
La PSCL se basa en el estudio de los procesos naturales psicosociales que son:
1.    1.    HABITUALIZACIÓN Y NATURALIZACIÓN: la persona crea estructuras de comportamiento estables no discutidos y no conscientemente asumidos que configuran modos de enfrentar la vida cotidiana en forma natural, es decir que la persona crea un campo habitual de conocimiento y conducta en el que se organiza y decodifica la realidad cotidiana incluyendo la aceptación de las situaciones adversas las cuales se vuelven habituales y familiares. Estos procesos son la vía para aceptarlos e internalizarlos y verlos como parte del modo del mundo y por lo tanto los naturalizan.
2.   2.     PROBLEMATIZACIÓN: problematizar es un proceso crítico del conocimiento donde se desechan ciertos fenómenos reflexionando sobre sus causas y consecuencias. La problematización debe conducir  a la desnaturalización porque en el cuestionamiento se rebelan las contradicciones socio políticas.
3.  3.      CONCIENTIZACIÓN: el proceso de la conciencia es de carácter liberador respecto a las situaciones. Es llegar a ser alguien comprometido, ejerciendo derechos y asumiendo deberes en la conducción cotidiana de la realidad. La movilización de la conciencia y el compromiso son imperecederos.
Para lograr estos importantes objetivos la PSC establece estos Métodos y Técnicas:
-         - INVESTIGACIÓN Y ACCIÓN PARTICIPATIVA (IAP)
-        -  ANIMACIÓN SOCIO CULTURAL
-         - CAPACITACIÓN Y FORTALECIMIENTO DE SABERES LOCALES
-       -  DETECCION, RECONOCIMIENTO, CREACION Y MOVILIZACION DE REDES
El objetivo central es la transformación social. Hacer una PSC efectiva significa modificar el hábitat, el modo de vida y la concepción del sí mismo. Esto se logra por medio de la participación y compromiso de los grupos organizados.
La PSC es un campo de especialización de la Psicología que privilegia los fenómenos colectivos o de grupo de las comunidades a partir de factores sociales y ambientales a fin de obtener mejores condiciones de vida de los sujetos.
La Doctora Maritza Montero explica que la Psicología Comunitaria es producto de un desarrollo disciplinado que se ha ido conformando como una rama de la psicología, una disciplina científica que ha configurado un objetivo, desarrollando instrumento y principios generales, interpretaciones y explicaciones, hasta constituir un conjunto sistémico de premisas y conocimientos, ya sea desde una práctica o desde un proceso de constitución de teoría. La define como "la rama de la psicología cuyo objeto es el estudio de los factores psicosociales que permiten desarrollar, fomentar y mantener el control y poder que los individuos pueden ejercer sobre su ambiente individual y social para solucionar problemas que los aquejan y lograr cambios en esos ambientes y en la estructura social." (Montero M., 2004, P. 32)
Al analizar esta definición realizada por la autora en 1982 por primera vez, se evidencia que la incluye dentro de la psicología, por lo tanto debe usar el método de esa ciencia, no se trata de una nueva ciencia; su objeto es el estudio de factores de la psique de los individuos que integran a grupos de la sociedad, específicamente esos factores que pueden darle el poder a los individuos sobre el medio ambiente individual y social, un poder que debe ser desarrollado, fomentado, permanente, para así solucionar problemas comunes, además de cambiar la realidad en los ambientes y en la estructura social.
El papel de psicólogas y psicólogos comunitarios se convierte en el de facilitadores, cuyo grado de compromiso con la comunidad contribuyen a que ésta se organice, discipline y participe activamente en la solución de sus problemas a través de la toma de conciencia de su posición dentro de la sociedad y del cuestionamiento a la misma, apoyada por la metodología de la Investigación, Acción, Participación.
La Doctora Maritza Montero (2004), en su obra Introducción a la "Psicología Comunitaria. Desarrollo, conceptos y procesos", realizó una amplio desarrollo histórico de esta rama de la psicología, es por ello que, dentro del modelo monográfico, a continuación se realiza un resumen de lo contenido en dicha obra al respecto, tema que es de suma importancia para la comprensión general del tema ya que la reconstrucción histórica conlleva una esencia económica, social y política que configura a las sociedades, y así es muy didáctica la explicación del surgimiento de necesidades que son la esencia de la psicología comunitaria.
No suele haber fechas exactas del surgimiento de formas de producción de conocimientos. Sin embargo, el nacimiento de la psicología comunitaria en los Estados Unidos cuenta con el equivalente de una "partida de nacimiento". En efecto, es bien conocido que en mayo de 1965, en un congreso convocado por psicólogos sociales, clínicos y escolares en Swampscott, Massachusetts, se dio inicio a esta rama de la psicología. En ese congreso se decidió generar un nuevo tipo de formación para los psicólogos que les permitiese ejercer su práctica, así como desempeñar un nuevo rol en la comunidad.
Detrás de esta propuesta se encontraban el Movimiento de Salud Mental Comunitaria, la tendencia desinstitucionalizadora en el tratamiento de las enfermedades mentales, el movimiento sociopolítico de "Guerra a la Pobreza", programas de desarrollo y planificación urbanos la crítica y la revisión de los programas de beneficencia social y, un poco más atrás, la defensa de los derechos civiles y el antisegregacionismo.

Durante los años sesenta y setenta del siglo XX se produce una serie de movimientos sociales que difunden ideas políticas y económicas, entre ellas, la teoría de la dependencia, que van a influir sobre los modos de hacer y de pensar en las ciencias sociales. Entre esos movimientos se encuentran “La Psicología de la Liberación” de Ignacio Martin-Baró, la “Antipsiquiatría” de David Cooper, “Pedagogía del Oprimido” de Paulo Freire y la “Sociología Militante y Crítica” de Fals Borda, entre otros.

miércoles, 8 de julio de 2015

HACIA LA PSICOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN

LA PSICOLOGIA DE LA LIBERACION

FUNDAMENTACION (con fragmentos de la conferencia del Lic. Ignacio Martin-Baró)

En psicología siempre se aspiro a la necesidad de la liberación personal, es decir que seamos capaces en orientar nuestra vida hacia los objetivos que consideramos valiosos. Nunca estuvo clara la psicología en diferenciar la desanielacion personal de la desalineación social, entre control individual y poder colectivo, entre la liberación de cada persona y la liberación de todo un pueblo o comunidad. Más aun la oscureció en vez de aclarar esas diferencias, de enajenación personal con la enajenación social. Como si las patologías y los trastornos del comportamiento humano estuvieran alejados de los hechos sociales. La Psicología debe trabajar por la liberación de los pueblos latinoamericanos en un proceso que como mostro Paulo Freire en su “alfabetización concientizada” que rompe con las cadenas de la presión personal y las de la presión social. Control externo o desesperanza asumida. Una nueva epistemología una nueva forma de pensamiento y de buscar el conocimiento. La liberación no existe en su presente de expresión sino en su mañana de libertad. “La verdad de las mayorías populares no hay que encontrarla, hay que hacerla”.

Una nueva perspectiva y una nueva Praxis
Desde abajo, desde las mayorías populares oprimidas, ¿como se ven los procesos sociales? ¿Se ven desde la posición y mirada del dominado o desde el lugar y mirada del dominador?.          Se trata de pensar la psicología no “para” los oprimidos sino “desde” los oprimidos. Paulo Freire planteaba una pedagogía del oprimido y no para el oprimido. Y esta es la idea de la Psicología de la Liberación (PSL).
Una nueva Praxis.
La teoría del conocimiento siempre estuvo condicionada por la propia realidad: lo que vemos y como lo vemos está condicionado  por nuestra perspectiva. Y es entonces que a veces la realidad se vuelve opaca. La nueva praxis significa involucrarse en esa realidad para ver lo “que es” y lo “que no es”. Solo así se lograra desarrollar una actividad transformadora logrando lo “que debe ser”. La teoría de investigación participativa de Fals Borda habla que solo la participación puede borrar la asimetría de sumisión y dependencia que implica a uno de sus lados. La PSL debe insertar sus cambios desde el dominado y no desde el dominador. Para ello el psicólogo debe dejar su posición de superioridad que tiene el tecnócrata y establecer una relación de compromiso y resonancia con el oprimido. Solo así en esa interacción se lograra no solo la transformación de la realidad de uno sino de ambos (acción transformadora y transformante). El problema que plantea la PSL es el tema del poder que politiza la acción. Es verdad que involucrarse es tomar partido y algunos creen que esto no es objetivo confundiendo parcialidad con objetividad. Se puede ser imparcial frente a los peores actos. Tres cosas plantea la PSL:
1.       La recuperación de la memoria histórica: significa recuperar la identidad latinoamericana descubriendo a través de la memoria colectiva aquellos elementos del pasado que fueron causa y lucha de las clases explotadas y que vuelvan a ser otra vez útiles para los objetivos de lucha, concientización y cambio. Esto supone reconstruir modelos de identidad.
2.       La desideologización del sentido común y la experiencia cotidiana: El conocimiento es una construcción social. Nos han dado el “garrotazo cultural” inundándonos de valores, perspectivas y praxis de otros lados que no nos han servido. Esto ha conformado un falso y ficticio “sentido común”. El pobre tiene los mismos derechos que el rico y debe tener también las mismas oprtunidades.
3.       La potenciación de las virtudes populares: Se trata de realizar un proceso de cuantificación y cualificación que resignifique y potencie las virtudes de nuestro pueblo y sus comunidades. Que revalore las virtudes de sus tradiciones y su cultura. Debemos abandonar las miradas hacia otras culturas para salir de la colonización.
Una PSL autentica requiere una liberación de la psicología tradicional convertida en una psicología social latinoamericana sustentada en una perspectiva y praxis desarrollada “desde” los sectores más vulnerables de nuestra comunidad.

ORIGEN DE LA PSL
El padre de la PSL y principal referente de la Psicología Social Latinoamericana fue Ignacio Martin-Baró, un psicólogo y sacerdote jesuita español que vivió gran parte de su vida en El Salvador e investigo la difícil realidad política y social de los pobres. Murió asesinado por un pelotón de fusilamiento de las fuerzas armadas de El Salvador el 16 de noviembre de 1989.
La PSL se nutre de la corriente crítica de la psicología que tiene dos orígenes: uno generado en la práctica de la sociología latinoamericana llamada “militante” o “critica” (Fals Borda) y de la influencia de la educación popular freireana que incluye a sociólogos, antropólogos y educadores. Esta corriente encuentra su expresión en la Psicología Social Comunitaria (Maritza Montero) y en el movimiento llamado “alternativas de la psiquiatría”.
La Psicología Social Comunitaria (PSC), la Psicología de la Liberación (PSL) y la Psicología Critica (PC) son tres expresiones que actúan como vasos comunicantes de una misma concicncia social de responder efectivamente a las necesidades de sociedades que deben romper con su destino histórico de pobreza, sumisión e ignorancia. Estas tres expresiones que fijan su acción y pensamiento en el ámbito latinoamericano, coinciden plenamente en generar una práctica transformadora de la realidad social creando una praxis efectiva en un movimiento dialectico y analectico. La analectica a través de su enfoque dialógico permite el acceso a esos otros que introducen la diversidad, lo inesperado, lo distinto de la “otredad”, lo cual impide la cristalización de ideas y conceptos, la estereotipia y la ritualizacion de acciones.
La relación entre las tres tendencia presenta vía libre para aplicar la Psicología Social de Pichón Riviere, herramienta fundamental y necesaria para responder a los problemas de las comunidades latinoamericanas afligidas por la desigualdad, la exclusión y la opresión, aplicando su Teoría de la Salud Mental, el cambio y la Adaptación Activa a la Realidad en una relación transformadora y transformante en la producción de sujetos sociales sanos.

** TRABAJO DE INVESTIGACION Y RECOPILACION DE DATOS REALIZADO POR EL AUTOR  **
“LA FELICIDAD DE CADA UNO” (para leer y reflexionar)

Cuento: EL HOMBRE JUNTO A LA VENTANA

Dos hombres, ambos muy enfermos, ocupaban la misma sala de hospital. A uno  de ellos se le permitía sentarse en su cama por una hora cada tarde para ayudar a drenar el líquido de sus pulmones y su cama daba a la única ventana de la habitación. El otro hombre tenía que estar todo el tiempo acostado boca arriba por un problema de columna y se encontraba en una depresión muy profunda. Los hombres hablaron durante horas y horas. Hablaban de sus mujeres y sus familias, sus hogares, sus trabajos, sus proyectos, donde habían estado en vacaciones, etc.
Todas las tardes, cuando el hombre de la cama junto a la ventana podía sentarse, pasaba el tiempo describiendo a su vecino todas las cosas que podía ver fuera de la ventana. El hombre de la otra cama empezó a desear los períodos de una hora diaria en que su mundo se ensanchaba y cobraba vida con todas las actividades y colores del mundo exterior que le relataba su compañero de sala.
La ventana daba a un parque con un precioso lago. Patos y cisnes jugaban en el agua, mientras que los niños jugaban a la pelota. Los jóvenes enamorados paseaban de la mano entre flores de todos los colores y una buena vista del horizonte de la ciudad podía verse a la distancia.
A medida que el hombre de la ventana describía todo esto con detalles exquisitos, el hombre al otro lado de la habitación cerraba los ojos e imaginaba la pintoresca escena.
Asi pasaron los días. El hombre junto a la ventana empeoraba su salud y el otro hombre iba mejorando. Hasta que una mañana, la enfermera encontró el cuerpo sin vida del hombre junto a la ventana, que había muerto pacíficamente mientras dormía. Ella se entristeció y llamó al asistente del hospital para llevarse el cuerpo.
Al cabo de un rato, el otro hombre preguntó si podía ser trasladado junto a la ventana. Lenta y dolorosamente, se apoyó en un codo para lanzar su primera mirada en el mundo real que había afuera. Se esforzó para girarse despacio y mirar por la ventana. Pero ésta daba a una pared en blanco. Asombrado y confundido, el hombre preguntó a la enfermera qué podría haber motivado a su compañero fallecido, para describir cosas tan maravillosas a través de la ventana. La enfermera respondió que el hombre era ciego y ni siquiera podía ver la pared. Ella le dijo: “Tal vez sólo quería animarlo a usted”.

REFLEXION PERSONAL
Cuando terminé de leer este cuento quedé impresionado. Y no sabía bien porqué. Quizás por lo imprevisto del final, o por la inocencia esperanzadora del hombre que estaba sin poder moverse. O por el hombre de la ventana y su actitud altruista. Y me preguntaba: ¿Hay una felicidad personal en hacer que los demás sean felices, a pesar de nuestras propias situaciones?
¿Es verdad que el dolor compartido es la mitad de la pena, pero la felicidad cuando se comparte, es doble? Hay un dicho árabe que dice que “Para sentirse rico, solo hay que contar las cosas que el dinero no puede comprar. El día de Hoy es tu regalo, por eso se lo llama El Presente ". Si la felicidad es un valor del presente, entonces es bastante desigual. Porque pienso en el presente de un chico de la villa y no es igual al de un chico que vive en barrio norte claro. Son presentes desiguales. E injustos. Pero están. Y ninguno de los dos tiene la culpa claro. Pero están. Y ahí me di cuenta de porque me conmovió este cuento. Porque el hombre de la ventana se imaginaba un mundo ideal que no podía ver y a pesar de eso y de su condición, le contaba ese mundo imposible a su compañero que lo conocía pero que no podía verlo.
 ¡Que grandeza la del hombre de la ventana que sabiéndose excluido y vulnerable ayudaba a su compañero solo para hacerlo feliz!  Y ahí entendí porque la felicidad para muchos, como yo, es estar al lado de la gente que es igual al hombre de la ventana.

Roberto Carballo